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Acompáñame en un recorrido por los encantos turísticos de Santa Coloma de Gramenet, una ciudad llena de historia y belleza natural.
Comenzaremos nuestro viaje en el punto más alto de Puig Castellar, que se alza majestuosamente a 303 metros sobre el nivel del mar. Aquí encontraremos las fascinantes ruinas de un antiguo poblado íbero perteneciente a la tribu laietana, fundado alrededor del siglo VI a.C. Este poblado era un asentamiento de tamaño mediano dedicado principalmente a la agricultura, la ganadería y, en menor medida, a la metalurgia y la tejeduría.
Nuestra siguiente parada nos lleva a la imponente Església Major, uno de los últimos edificios de estilo neogótico construidos en Cataluña. Diseñado y dirigido en parte por Francesc d'Asís Berenguer i Mestre, íntimo colaborador del genial Gaudí con quien trabajó durante veintisiete años, este templo fue inaugurado el 5 de septiembre de 1915. Su arquitectura cautiva con sus detalles elaborados y su esencia gótica renovada.
Continuamos nuestro recorrido hacia la Torre Balldovina, el único edificio románico en la comarca que ha llegado intacto hasta nuestros días. Esta torre circular, construida probablemente en el siglo XI, destaca por su estructura irregular compuesta por piedras de diferentes tamaños. En la parte superior, podemos admirar sus almenas restauradas recientemente, que coronan esta joya arquitectónica.
Ubicado junto a la Torre Balldovina, encontramos el museo local, un espacio pluridisciplinario encargado de proteger, conservar, estudiar y difundir el patrimonio cultural y natural de Santa Coloma de Gramenet. A través de colaboraciones con entidades públicas y privadas, este museo se convierte en un centro vital de la vida cultural y cívica de la ciudad.
Siguiendo nuestro camino, descubriremos el Molí d'en Ribé, un antiguo molino harinero que data de finales del siglo XIII o principios del XIV. Situado junto a la Torre Balldovina, este molino estuvo en funcionamiento hasta principios del siglo XX. Su nombre proviene de la familia Riber, propietaria de la Torre Balldovina durante los siglos XVII y XVIII.
No podemos dejar de visitar la majestuosa Torre Pallaresa, una destacada obra de la arquitectura catalana del siglo XVI y uno de los palacetes renacentistas más importantes del país. Declarado monumento histórico-artístico de interés nacional en 1931, este edificio tiene sus raíces en la Edad Media y fue reformado en el siglo XVI. La ampliación realizada por el obispo Cardona conserva la planta gótica original e incorpora dos torres laterales y una galería con arcos rebajados en el cuerpo central. En todo el edificio, se pueden apreciar diversos elementos decorativos en puertas y ventanas de estilo plenamente renacentista, que conviven armoniosamente con ventanas y arcos de tradición gótica.
Pero Santa Coloma de Gramenet no solo ofrece joyas arquitectónicas, también cuenta con espacios naturales que son un gran atractivo para disfrutar al aire libre y descubrir la biodiversidad de la zona. Estos espacios naturales representan actualmente más del 28% de la superficie total del municipio. Destacan la Serralada de Marina y la llera del riu Besòs, dos grandes áreas que conforman el entorno natural de Santa Coloma.
El Parc de la Serralada de Marina, una importante reserva ecológica que abarca el municipio de Santa Coloma, desempeña un papel fundamental como pulmón verde en el Área Metropolitana. Aquí, tendrás la oportunidad de observar una flora y fauna únicas de la región biogeográfica mediterránea, con especies como alcornocales, robledales y pinos. Además, el Parc se encuentra en la ruta migratoria de las aves de la Mediterránea occidental, lo que lo convierte en un lugar privilegiado para la observación de aves.
Finalmente, llegamos al Parc de Can Zam, un espacio de 11 hectáreas que destaca por su proximidad al río, lo cual le confiere un carácter de conexión entre la ciudad y el entorno fluvial. Con su forma de cuadrado irregular y un diseño geométrico de líneas bien definidas, el parque se divide en dos sectores con características distintas. El primero, más cercano a la montaña, cuenta con una amplia plaza y vegetación exuberante, mientras que el segundo, más cercano al río, ofrece un gran lago y predominio de especies vegetales de ribera.
Santa Coloma de Gramenet te espera con su rica historia, impresionante arquitectura y hermosos espacios naturales. ¡Ven y déjate cautivar por esta encantadora ciudad!