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Sumérgete en la cautivadora región del Garraf, un rincón de extraordinaria belleza mediterránea ubicado a pocos kilómetros de Barcelona. Este territorio, en apariencia árido pero sorprendentemente sediento de agua, se distingue por su accidentado litoral y un paisaje interior que absorbe la lluvia con insaciable sed. Aquí encontrarás una combinación perfecta de mar y rocas, viñedos y castillos, festividades y tradiciones, naturaleza exuberante, sabores auténticos y mucho más.
Durante largos períodos, el Garraf fue una zona fronteriza con los sarracenos. Este pasado estuvo marcado por conflictos y violencia, aunque predominaron las disputas entre los nuevos colonos cristianos, más que los enfrentamientos con los musulmanes, como podría pensarse. Los monasterios, hospitales, restos de pueblos medievales, iglesias, ermitas y, sobre todo, los castillos, son testigos vivos de las fascinantes historias y leyendas que se desvelan aquí.
El imponente Castillo del siglo X, actual sede de la Fundación Abertis y ubicado en la orilla norte del embalse de Foix, es el punto de partida de apasionantes rutas que te permitirán descubrir la riqueza natural de la zona. En junio, este entorno se transforma en el escenario de un auténtico mercado medieval que te transportará a una época en la que la austeridad realzaba los encantos de este paisaje privilegiado.
El Castillo de Canyelles, majestuoso y emblemático, define el pueblo con su conjunto monumental junto a la iglesia, en lo alto de una colina a 142 metros de altitud. Su presencia es visible desde todos los accesos al municipio y se remonta al siglo XV, cuando pertenecía a Franci Terré, señor de Canyelles. Se cree que en sus inicios fue una torre defensiva del gran bastión de Olèrdola. Los restos que se conservan de aquella época incluyen una torre de planta circular y un fragmento de muralla con cinco almenas. En la actualidad, es una propiedad privada reconstruida por su dueño, quien cede su uso al Ayuntamiento para actividades populares.
La Ermita de la Trinidad, situada en medio del Parque del Garraf con el mar de fondo, es un regalo para los amantes de las rutas de senderismo en familia. Esta encantadora ermita, de arquitectura popular y protegida como Bien de Interés Local, tiene una historia documentada desde 1375. Su entorno la hace única y se asemeja a la representación idealizada que los niños (y muchos adultos) harían de una iglesia: en lo alto de una montaña, pequeña, blanca y con vistas al mar. Su fachada de entrada, revestida de piedra y adornada con arcos, completa el espectáculo visual.
El Monasterio del Garraf, ubicado en el Palau Novella del Parque del Garraf, es unsingular edificio modernista construido en 1890 que alberga actualmente la casa espiritual de la comunidad Sakya Tashi Ling. Esta comunidad fundó el monasterio en 1996, manteniendo y respetando el valioso patrimonio cultural del edificio y su entorno. Además de adentrarte en la refrescante aventura de la naturaleza y la espectacular paz que transmite pasear por allí, el templo budista del Garraf Sakya Tashi Ling ofrece numerosas opciones y actividades tanto para los curiosos como para aquellos que deseen profundizar en el budismo.
Si buscas un lugar tranquilo y pintoresco, no puedes perderte la playa del Garraf. Este arenal, rodeado de encantadoras casas blancas y verdes construidas hace más de un siglo, es una playa poco concurrida y protegida del viento. Es el lugar perfecto para relajarse y disfrutar del sol y el mar. Además, en las proximidades podrás pasear por el animado paseo marítimo, deleitándote con las terrazas y las vistas panorámicas al mar.
La playa de San Sebastián, una de las más populares de Sitges, también merece una visita. Ubicada en el centro de la ciudad y en un antiguo barrio marinero, esta playa atrae a muchas familias debido a sus aguas poco profundas y cristalinas, ideales para que los niños jueguen libremente. Cuenta con todos los servicios necesarios para disfrutar de una jornada playera, incluyendo accesos adaptados para personas con movilidad reducida. Además, podrás deleitarte con un agradable paseo por el paseo marítimo, repleto de terrazas que ofrecen vistas panorámicas al mar.
Visitar el Garraf es sumergirse en un entorno natural y cultural fascinante. Desde los imponentes castillos y las encantadoras ermitas hasta las playas pintorescas y los animados paseos marítimos, este lugar te brinda una experiencia turística inolvidable. Descubre la belleza del paisaje que combina mar y montaña, degusta los auténticos sabores locales y sumérgete en la rica historia y tradiciones de esta encantadora región mediterránea. Explora el Garraf y déjate cautivar por su encanto único.