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• Datos de Caldes d'Estrac

Sumérgete en el encanto del litoral costero de Caldes d'Estrac, un destino que a lo largo del tiempo ha cautivado a aquellos que buscan disfrutar del buen clima y refrescarse en las aguas del mar. Las playas de Caldes han sido reconocidas en múltiples ocasiones con la prestigiosa Bandera Blanca, un distintivo de calidad otorgado anualmente por la Unión Europea debido a la excelencia de sus instalaciones.

Oficialmente, Caldes d'Estrac cuenta con dos playas principales: la Playa de los Tres Simios y la Playa del Kalima o de la Riera. Sin embargo, a nivel popular se añaden otras dos, la Playa del Bassiot y la Playa de la Musclera (compartida con Arenys de Mar). Cada año, estas playas atraen a bañistas de todas partes, que acuden tradicionalmente a nuestro municipio para disfrutar de lo que antiguamente se conocía como los beneficiosos "baños de mar". El excelente estado de las playas y el clima favorable de la zona hacen que el litoral de Caldes d'Estrac reciba un gran número de visitantes dispuestos a pasar largas jornadas bajo el sol y disfrutando del mar.

La Playa de los Tres Simios se encuentra en un entorno urbano, rodeada por el municipio de Caldes d'Estrac. Al norte, limita con un espigón cercano al Hotel Colon, separándola de la Playa de la Riera. Al sur, está delimitada por la Riera del Gorg, que la separa de la Playa de Sant Vicenç de Montalt. Este hermoso tramo de costa ha sido reconocido con la Bandera Blanca, un prestigioso galardón de alcance mundial que certifica el cumplimiento de criterios de legalidad, accesibilidad, sanidad, limpieza y seguridad, así como una adecuada gestión ambiental.

La Playa del Kalima, también ubicada en un entorno residencial dentro de Caldes d'Estrac, es otro lugar encantador para disfrutar del mar. Al norte, se encuentra limitada por un pequeño espigón en la altura del pasaje de Levante, separándola de la Playa de Arenys. Al sur, el espigón cercano al Hotel Colon la separa de la Playa de los Tres Simios. Esta playa también ha sido beneficiada con la Bandera Blanca y ofrece un escenario perfecto para relajarse y deleitarse con las aguas y el entorno natural.

Los baños termales han sido a lo largo de la historia el principal atractivo de Caldes d'Estrac. Desde la época de los romanos, que conocían este lugar como Aquae Calidae, hasta la influencia árabe, personas de todas las épocas y culturas han disfrutado de las aguas termales de Caldes debido a sus propiedades beneficiosas para la salud. Situados en el centro del pueblo, junto a la plaza de la Vila, los baños termales datan del siglo XIX y son los únicos de titularidad pública en toda Cataluña. Las aguas emergen de una galería subterránea a una temperatura de 38 grados centígrados y tienen propiedades mesotermales, bicarbonatadas, cloruradas sódicas, hipotónicas, de mineralización media y baja dureza. Estas características las hacen ideales para tratar afecciones reumáticas, artrosis, problemas respiratorios, traumatismos osteoarticulares, cálculos urinarios y oxálicos, así como inflamaciones crónicas en las vías urinarias.

Además de sus atractivas playas y aguas termales, Caldes d'Estrac cuenta con otros puntos de interés. El edificio del Mercado Municipal, ubicado en la Riera de Caldes, es un ejemplo destacado del modernismo arquitectónico. Construido en 1906 según los planos del arquitecto Joaquim Sallés i Codina, originalmente albergaba un teatro con sala de baile. Posteriormente, se convirtió en la sede del ateneo catalanista Rosa d'Or y, desde 1918, la planta baja funciona como mercado municipal, ofreciendo productos locales y tradicionales.

El Parque Muntanyà, situado en la falda sur del Puig Castellar, es otro lugar emblemático de Caldes d'Estrac. Antiguamente, era el jardín de la lujosa casa de Adolfo Montañá, originario de Granollers, quien adquirió estos terrenos a su regreso de Cuba alrededor de 1934. Este amplio espacio natural en el corazón del pueblo es perfecto para pasear, relajarse y disfrutar de la tranquilidad en medio de la naturaleza y hermosos paisajes. Gracias a su constante preservación y mejora, el Parque Muntanyà ha contribuido al desarrollo equilibrado y armónico de Caldes, manteniendo y realzando su ecosistema natural. Siguiendo una ruta guiada por el parque, podrás descubrir la vegetación y la extensión de este espacio natural emblemático de Caldes, además de disfrutar de vistas espectaculares del municipio y su entorno.

Por último, el templo parroquial dedicado a Santa María, de origen medieval, ofrece una muestra arquitectónica de gran interés histórico. Antiguamente, cumplía las funciones de capilla de un conjunto hospitalario. Destacan la lápida sobre la puerta de la fachada, con una invocación en latín dedicada a la Virgen María, y la pila bautismal con forma de capitel. El edificio de la parroquia, construido entre 1808 y 1830 en sustitución de un templo románico, presenta una nave con capillas laterales entre los contrafuertes. En el siglo XIII se conserva la pila bautismal y una lápida gótica empotrada sobre la puerta principal. El campanario fue reconstruido y ampliado en 1868, y la iglesia adquirió su aspecto actual en 1949, con una fachada de estilo neorrománico.