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El encantador municipio de Dénia, ubicado en una suave elevación en el corazón de la ciudad, alberga una serie de atracciones turísticas que deleitarán a los visitantes con su historia y belleza. Una de las joyas destacadas es el imponente Castillo de Dénia, cuya estructura completa y majestuosa define la topografía del lugar. Este castillo, con raíces que se remontan a la Antigüedad Clásica, ofrece vistas panorámicas desde su posición privilegiada. Desde sus murallas, se puede contemplar el núcleo urbano, el impresionante Parque Natural del Montgó, la Reserva Marina del Cap de Sant Antoni y el resplandeciente Golfo de Valencia.

Para los amantes de los juguetes y la nostalgia, el Museo del Juguete es una parada obligada. Aquí se exhibe una amplia variedad de juguetes que nos transportan a una época pasada y nos muestran la importancia de la industria juguetera a partir de 1904. Los juguetes de metal y madera dominan la escena, creando desde flotas de coches y aviones de pedales hasta ingeniosos barcos de vela, carros y camiones que reproducen a los grandes del transporte terrestre. También se pueden encontrar cocinas de madera, juegos de bolos y anillas, entre otros encantadores objetos. El museo cuenta la historia de la primera industria juguetera de Dénia, que comenzó con juguetes de hojalata litografiada importados de Alemania y evolucionó hacia la fabricación de juguetes de madera con acabados meticulosos y decorados con apliques metálicos.

Sumergiéndonos en el mundo marítimo, encontramos el Museo de la Mar de Dénia, un nuevo espacio museístico que alberga más de 400 piezas arqueológicas y etnológicas relacionadas con el mar. Desde el siglo VI a.C. hasta principios del siglo XX, este museo narra la historia marítima de la región. Ubicado en las instalaciones de la antigua lonja de pescado, en la Explanada Cervantes, cerca del puerto, el museo ofrece una mirada fascinante a la conexión histórica de Dénia con el mar y su importancia cultural.

Explorando la herencia histórica de Dénia, nos encontramos con el yacimiento de las murallas urbanas de Daniya-La Medina y el Fortí. Al final del Paseo Saladar, se pueden apreciar las ruinas de la muralla noreste del Fortí musulmán de Daniya, que ha sido declarada Bien de Interés Cultural. Estas murallas formaban parte del arrabal de la medina, un área que ocupaba 12 hectáreas al sureste de la medina y que estaba rodeada por una sólida muralla. Uno de los elementos destacados es el torreón rectangular en el ángulo noreste del recinto, que testimonia la existencia de esta antigua fortificación. Este sitio arqueológico es un testimonio vivo del pasado medieval de Dénia y brinda la oportunidad de sumergirse en su historia fascinante.

Continuando nuestro recorrido, llegamos a la imponente Iglesia de Nuestra Señora de la Asunción. Esta iglesia, con una planta de cruz latina inscrita en un rectángulo, cautiva a los visitantes tanto por su exterior como por su interior. En el exterior, destaca una hornacina venerada sobre la puerta de la capilla del Roser, que alberga una imagen moderna de Sant Roc (San Roque). En el interior, la iglesia alberga valiosas obras de arte religioso, como una imagen policromada de la Asunción de la Virgen y las representaciones de los santos Vicente Ferrer y Vicente Mártir, los patronos de Valencia. La estructura de la iglesia se distingue por su tejado a dos aguas y una cúpula central llamativa, cubierta con tejas azules y apoyada en un tambor octogonal. En el interior, la nave se extiende en cuatro tramos cubiertos por una bóveda de cañón con lunetas, y las capillas laterales están rematadas con cúpulas circulares. El amplio crucero con su cúpula semiesférica y las pinturas al fresco de finales del siglo XVIII que decoran la pechina de la cúpula y el crucero añaden un toque de esplendor artístico al lugar. Además, no se puede pasar por alto la mesa del siglo XVI con la figura de San Vicente Ferrer y la cruz procesional de mediados del siglo XVII, que son verdaderas joyas de la iglesia.

Por último, la Iglesia de San Antonio se destaca como parte de un conjunto arquitectónico que incluye el Convento de San Antonio de Padua y la plaza del siglo XVII. A pesar de los graves daños sufridos durante diversos conflictos históricos, esta iglesia ha mantenido su encanto y es un testimonio de la historia franciscana del lugar. Su portada de estilo dórico, con una hornacina venerada que contiene una imagen moderna de San Antonio de Padua, es una muestra de su arquitectura distintiva. En el interior, una gran cruz esmaltada con escenas bíblicas preside el altar mayor, una obra esculpida en 1990 por el orfebre alemán Egino Weiner, reconocido por sus obras expuestas en el Museo del Vaticano. La torre del campanario, parte integral de la fachada, se destaca con su cuerpo de campanas y pilastras de estilo dórico con cuatro arcos de medio punto.

Dénia es un lugar lleno de historia, cultura y encanto, y estas atracciones turísticas son solo una muestra de lo que esta hermosa ciudad tiene para ofrecer. Explorar estos sitios permite sumergirse en su rica herencia y disfrutar de su belleza arquitectónica y artística, dejando una huella imborrable en la memoria de los visitantes.