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• Datos de Puigcerdà

Bienvenidos a Puigcerdà, un encantador municipio situado al noroeste de Barcelona, inmerso en la majestuosidad de los Pirineos centrales y rodeado por la hermosa comarca de la Cerdanya, que actúa como su capital. Este lugar se distingue por su excepcional delimitación natural, con un amplio valle rodeado de imponentes montañas tanto pirenaicas como prepirinaicas.

En esta pintoresca localidad, destaca el Convento de Sant Domènec, una imponente construcción de única nave que es el más grande de la Cerdanya. A pesar de haber sufrido daños debido al terremoto de 1428, sus cubiertas de doble vertiente se sostienen gracias a majestuosos arcos ojivales que se apoyan en imponentes contrafuertes. Además, encontrarás varias capillas laterales con destacados retablos que engrandecen aún más esta estructura.

El Estany de Puigcerdà, alimentado por el canal, ha sido durante mucho tiempo un importante proveedor de agua para usos domésticos, como la irrigación, la limpieza de canales y alcantarillas, así como para hacer frente a los incendios, tareas que todavía se realizan en la actualidad. Después de una reforma iniciada en 1991 y finalizada a finales de la década, el estanque ha adoptado una nueva forma sinuosa, dejando atrás su antiguo hexágono irregular. Con esta transformación, se ha prescindido de la barandilla de piedra, se ha movido la isla central, se ha modificado la iluminación y se han integrado nuevos elementos arquitectónicos, vegetales y señalizadores, convirtiendo este espacio en un lugar encantador para explorar y disfrutar.

No dejes de visitar el Museo Cerdà, un espacio que ofrece una exposición permanente dedicada a los conventos medievales de Puigcerdà y al Convento de Clausura de Puigcerdà. Este museo te permitirá conocer a fondo la rica historia y el patrimonio cultural de esta encantadora localidad.

El Ayuntamiento, con sus orígenes góticos y probablemente construido a finales del siglo XIII, ha superado varios obstáculos a lo largo del tiempo. A pesar de haber sido destruido por un incendio en 1938, todavía se puede admirar una sala con una magnífica bóveda de arista en su interior, donde destaca una clave de bóveda esculpida con las armas de la Villa. Este edificio es un testimonio de la arquitectura civil gótica catalana y un constante recordatorio del glorioso pasado de Puigcerdà.

El Campanario de Santa Maria es un testimonio emblemático del complejo arquitectónico antiguo del pueblo. Se alza majestuosamente por encima de los tejados de las casas y ha sido durante mucho tiempo un símbolo distintivo de Puigcerdà. Aunque actualmente alcanza los 35 metros, se sabe que antiguamente tenía un techo cubierto con láminas de bronce coronado por una aguja dorada. Con un estilo arquitectónico particular, el campanario muestra dos etapas constructivas claramente diferenciadas. Desde su base cuadrada, construida con robustos pilares revestidos de granito bien tallado, se eleva una estructura octogonal con paredes que combinan de manera armoniosa elementos de granito y aristas de gran belleza.

El Puente de Sant Martí, considerado el mejor ejemplo de puente gótico de la comarca, fue sometido a una importante reconstrucción entre los años 1326 y 1328. Con sus dos arcos de medio punto, uno más grande que el otro, el puente atraviesa el río Querol o Aravó entre los municipios de Puigcerdà y Guils de Cerdanya. En tiempos pasados, esta estructura era una vía de paso crucial en la ruta de la antigua Strata Ceretana de los romanos, testigo de la rica historia que se respira en este lugar.

Aunque las murallas que rodeaban antiguamente la Villa fueron derribadas hacia 1885, todavía se conservan varios vestigios catalogados de estas defensas en la parte occidental, que te permitirán adentrarte en el pasado medieval de Puigcerdà.

No olvides visitar Can Deulofeu, una encantadora construcción situada en la calle Querol que es uno de los pocos ejemplos que quedan de la arquitectura gótica popular de la comarca. Con una reforma realizada aproximadamente en 1911, este edificio mantiene varios elementos de interés, como los arcos ciegos de su lateral, que te transportarán a épocas pasadas.

Para completar tu experiencia, te invitamos a pasear por el Parc Schierbeck, creado a finales del siglo XIX gracias al impulso de German Schierbeck, cónsul de Dinamarca en Barcelona. Este parque, inaugurado en 1925 con un diseño diferente al actual, fue objeto de una gran reforma en 1992. Te sorprenderá su gran diversidad de vegetación, que crea un entorno verde y acogedor ideal para relajarse y conectar con la naturaleza.

Te invitamos a descubrir toda la belleza y la riqueza histórica de Puigcerdà. Con su impresionante entorno natural, su fascinante patrimonio arquitectónico y su encantadora atmósfera, este municipio te invitará a vivir una experiencia turística inolvidable.