Gestión de alquiler vacacional en la Vall d'Uixó

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• Datos de la Vall d'Uixó

Descubre la fascinante localidad de la Vall d'Uixó, donde podrás explorar vestigios de la presencia humana desde el Paleolítico, especialmente cerca de las Coves de Sant Josep, donde antiguos grupos de cazadores-recolectores hicieron de las cuevas su hogar. Aunque íberos y romanos también dejaron su huella en el municipio, fue durante la época andalusí cuando comenzó a tomar forma el casco urbano que se admira en la actualidad.

Sumérgete en las maravillas de las Coves de Sant Josep, que albergan el río subterráneo navegable más largo de Europa. Esta joya natural única te permitirá adentrarte en las profundidades de la Sierra de Espadán, siguiendo un camino trazado por el agua a lo largo de milenios. Además de su impresionante paisaje subterráneo, las Coves de Sant Josep y su entorno son un enclave cultural de gran importancia. En la entrada de la cueva, podrás admirar pinturas y grabados prehistóricos únicos en toda la comarca. También cerca se encuentra el Poblado Ibérico de Sant Josep, un yacimiento arqueológico visitable ubicado en la cima del cerro que alberga las Coves de Sant Josep, junto a la Ermita barroca de la Sagrada Familia.

El Poblado de Sant Josep, situado en lo alto del cerro del mismo nombre, fue construido durante la Edad del Bronce y alcanzó su esplendor durante la época ibérica (entre los siglos VI y II a.C.) y a finales del Imperio Romano (entre los siglos IV y V d.C.). Este asentamiento cuenta con un pequeño recinto amurallado protegido por torres de planta cuadrangular, de las cuales aún se conservan tres bases. La muralla fue construida con mampostería, utilizando piedras irregulares y bien ajustadas. Este yacimiento es un magnífico ejemplo de urbanismo ibérico y conserva gran parte de su acrópolis.

Admira la espléndida arquitectura religiosa de la Iglesia de Nuestra Señora de la Asunción, que fue construida entre los siglos XVII y XIX. Destaca su torre campanario barroca, finalizada en 1791 según los diseños del maestro Jacinto Agustí y restaurada en 1991. Te recomendamos subir a la torre para disfrutar de las maravillosas vistas de la sierra y el mar mientras escuchas el repicar de sus siete campanas.

Visita la Iglesia del Santo Ángel Custodio, sede parroquial del Lloc de Dalt. Su construcción se inició en el siglo XVII y se amplió en el siglo XVIII. Destaca su cúpula de tejas azules, característica del estilo mediterráneo. En el interior de la iglesia, podrás admirar una colección de frescos obra de Jose de Vergara, que representan escenas gloriosas y que datan alrededor de 1760. También es digna de admiración la Virgen de los Ángeles, un lienzo del siglo XVII.

Contempla la majestuosidad de la Ermita de la Sagrada Familia, la más popular de la ciudad y declarada Bien de Relevancia Local. Esta ermita barroca cuenta con una planta interior de una sola nave con crucero, aunque los brazos del crucero están poco desarrollados. En su interior, encontrarás un óleo que representa la aparición de la Virgen de Fátima y un vistoso altar presidido por la Inmaculada. No dejes de admirar la cúpula ciega que cubre la nave, decorada con elementos barrocos en dorado.

Visita el Ayuntamiento, conocido como Casa de la Vila, que fue terminado en 1931 para conmemorar la concesión del título de ciudad. Este edificio construido en estilo neobarroco sirve como punto de encuentro entre las dos realidades que conforman el pueblo: El Lloc de Dalt y El Lloc de Baix.

Descubre los restos arqueológicos de la Torre de Benigafull, que perteneció al siglo XIV y estaba adosada al Palacio del Duque de Segorbe, señor del pueblo. Esta torre es un símbolo del poder feudal y fue el origen del escudo municipal. En su interior, podrás admirar una pieza de la vajilla del Duque de Segorbe descubierta en el lugar.