Enfocados en la excelencia, gestionamos alquileres vacacionales con atención al detalle, asegurando la tranquilidad de los propietarios y la comodidad de los huéspedes.
Nos ocupamos de todo en MasterGuest: desde la promoción hasta el mantenimiento y la limpieza.
¿Necesitas apoyo para administrar tus propiedades turísticas? Estamos aquí para ayudarte.
¿Deseas incrementar tus ingresos? Trabajemos juntos para maximizar la ocupación y ganancias de tu alojamiento.
Es Castell, antaño llamado George Town por sus fundadores británicos, aún preserva huellas de esa época de dominio inglés que se vislumbran en cada detalle de su arquitectura y tradiciones. Reconocido por su vida portuaria, este pueblo se distingue por su hospitalidad y apertura hacia los visitantes. Su panorama desde los puntos elevados permite admirar la imponente fortaleza de La Mola y dos icónicos islotes, el Rei y el Llatzaret, que se tornan espectaculares bajo la luz nocturna. La fortificación de Sant Felip, en la entrada del puerto, guarda historias de invasiones y evoca la esencia del siglo XVIII, ubicada a pocos kilómetros de la apacible cala de Sant Esteve, donde se erige el Fort Marlborough. Al ser la población más oriental de la isla y de España, brinda la oportunidad de experimentar amaneceres marinos fascinantes.
Su diseño urbano conserva el trazado original con calles rectas, la plaza de armas y una arquitectura británica con elementos distintivos como los 'boinders' y las ventanas de guillotina. La riqueza histórica se encuentra en lugares como el Museo Militar, frente al Ayuntamiento de tono rojo inglés, donde se guardan planos, información y pinturas de época que revelan los episodios pasados. Mirando al majestuoso puerto de Mahón, sus calles desembocan en Cales Fonts, un antiguo muelle convertido en un escenario mediterráneo con terrazas, tiendas artesanales y cuevas reconvertidas en espacios para pescadores, creando un encantador paisaje junto al mar.
Por su ubicación estratégica, Es Castell ha sido testigo de diversas influencias culturales a lo largo de los siglos. Las huellas británicas en su arquitectura y costumbres coexisten con la esencia mediterránea, fusionando la idiosincrasia local con elementos foráneos. La coexistencia de estos legados se manifiesta en su día a día, desde la distribución urbanística hasta la variedad gastronómica que mezcla platos típicos de la isla con aportes culinarios de la tradición inglesa.
El encanto de Es Castell se vive en sus celebraciones tradicionales que conectan con su pasado y sus raíces. Las fiestas patronales, como las de Sant Jaume y Sant Cristòfol, transforman las calles en un escenario de coloridos desfiles, música y danzas típicas que reflejan la fusión cultural de la localidad. Estos eventos constituyen una oportunidad para los lugareños y visitantes de compartir, celebrar y preservar la riqueza histórica y cultural que define a este entrañable pueblo.
Menorca, la tranquila y cautivadora isla del Mediterráneo, despliega su encanto en cada rincón. Su espectacular costa, salpicada de playas de arena blanca y aguas cristalinas, contrasta con un interior repleto de campos verdes, huertos y colinas onduladas. Desde los vestigios prehistóricos hasta la arquitectura que refleja la huella de diversas culturas que la han habitado, Menorca cautiva con su historia. La autenticidad de sus pueblos, la hospitalidad de su gente y su entorno natural preservado hacen de esta isla un destino único, donde la paz y la serenidad son el compás de una vida pausada en armonía con la naturaleza.