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El Mausoleo de Ramon Folch de Cardona-Anglesola, una magnífica joya del arte renacentista italiano, se encuentra en la iglesia de Sant Nicolau en Bellpuig. Este mausoleo honra la vida de Ramon de Cardona, quien fue virrey de Sicilia (1507) y Nápoles (1509). La temática del mausoleo narra la destacada biografía de Ramon de Cardona, resaltando su papel como hombre del mar, capitán triunfante y cristiano. La ornamentación que lo acompaña, inspirada en episodios bíblicos, mitológicos y en la propia vida de Ramon de Cardona, lo convierte en el monumento escultórico renacentista más relevante de nuestro país.
El Castillo de Bellpuig tiene sus orígenes en el siglo XI, pero fue en el siglo XII cuando se consolidó como propiedad de la familia Anglesola y, específicamente, de su baronía. A finales del siglo XIV, esta dinastía se extinguió y todas sus propiedades pasaron a manos de los Cardona. El castillo de Bellpuig es una construcción de planta cuadrangular con sus cuatro esquinas orientadas precisamente hacia los puntos cardinales. Los muros más largos son paralelos, con 58,40 m en el noroeste y 57 m en el sureste, pero los más cortos rompen con esta disposición regular. El muro noreste de 51,90 m forma un ángulo recto con los otros dos mencionados, mientras que el muro suroccidental, con 52,20 m, rompe ligeramente la disposición regular. Actualmente, el castillo se ve poco llamativo y es difícil hacerse una idea de su dimensión original debido al expolio de sus piedras, que lo ha reducido prácticamente al nivel inferior. Sin embargo, en la parte sureste se conserva casi íntegramente el muro correspondiente al primer piso, desde donde aún se puede disfrutar de una vista relativamente monumental de la antigua fortaleza. Los dos pisos de las aulas, añadidos posteriormente, dan una idea de la altura que ocuparía originalmente la construcción señorial. El interior de la parte baja del castillo es conocido solo parcialmente, ya que solo hay dos galerías accesibles situadas en paralelo a cada lado largo del edificio. El castillo de Bellpuig pertenece a la categoría de las fortalezas predominantemente residenciales que fueron construidas por la aristocracia durante el siglo XVI. En este tipo de construcciones, además de la función defensiva propia de cualquier fortaleza, se le dio gran importancia a la parte destinada a hacer agradable la vida dentro del edificio, así como a satisfacer de manera eficiente las necesidades derivadas de la explotación agropecuaria del territorio adyacente al castillo. Las ruinas actuales corresponden a esta época.
La escalinata de la iglesia es una impresionante obra monumental que data del año 1792. Siguiendo el estilo de la época, en la que eran frecuentes las grandes construcciones, se diseñó esta obra monumental y funcional que debía proporcionar comodidad a los fieles. Con cinco tramos de diez escalones cada uno, además del rellano y un pequeño tramo de cinco escalones en la parte superior, la escalinata recuerda al Rosario, con sus diez Avemarías y el Gloria al final. En el final de cada tramo, una barandilla de piedra bloquea el paso y rompe la monotonía de la obra con unos pomos en el centro, obligando a subirla zigzagueando.
La iglesia de Sant Nicolau cuenta con un portal con un arco de medio punto de más de 2 metros de diámetro, ornamentado con dos columnas estiradas que descansan sobre unos pedestales muy elaborados. Estas sostienen un pequeño frontispicio donde solía haber una imagen de piedra de Sant Nicolau. A una altura proporcional, se encuentra un rosetón de 6 metros de diámetro construido con piedra picada. De los tejados sobresalen largas gárgolas de piedra con formas monstruosas. La iglesia de Sant Nicolau data del siglo XVI y se sitúa dentro del estilo tardogótico, con un portal de estilo renacentista. El edificio actual, con una longitud de 46,8 metros y un ancho de 34 metros, está compuesto por tres edificios de planta rectangular. La capilla de Sant Crist de Bormio, ubicada junto a la iglesia parroquial y anterior a la capilla de los Dolors, tiene una bóveda clásica con una linterna en el centro y arcos ojivales a cada lado. El altar consta de un retablo de madera con relieves que se extiende desde la escalera hasta el sagrario y el ático.
El Convento de Sant Bartomeu se encuentra a unos 500 metros del centro de Bellpuig, a la izquierda de la carretera de Belianes. Desde el convento se puede disfrutar de una magnífica vista hacia el sur del municipio. El resultado final es un edificio de planta rectangular organizado alrededor de dos claustros centrales. El claustro más pequeño, ubicado cerca de la entrada, tiene dos pisos y es de estilo gótico, con arcos apuntados en la planta baja y una galería con arcos de medio punto en el primer piso. El segundo claustro, o patio de la cisterna, presenta una galería baja con cuatro arcos apuntados por lado, con bóveda de crucería que descansa sobre contrafuertes desproporcionados que dan al patio. De los contrafuertes se elevan pináculos espinosos coronados con un florón, que marcan el nivel de la segunda galería. Los cuatro pináculos angulares sobresalen hasta la cornisa que originalmente delimitaba la altura del patio. La tercera galería, de estilo toscano, con arcos rebajados sobre columnitas estriadas y balaustres, además de un generoso voladizo, fue construida en 1614. Sin duda, el elemento más destacado es la segunda galería mencionada, que casi no tiene precedentes en Cataluña, y se ha hablado de posibles influencias castellanas o portuguesas, aunque también podría haber sido obra de un maestro del sur de Italia. Las columnas helicoidales dan continuidad al movimiento de los arcos, y los capiteles, todos diferentes, están esculpidos con motivos vegetales, animales y figuras humanas.